El Decano del Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de Aragón, Navarra y País Vasco, Ángel Jiménez y el Secretario Técnico, Ignacio Oliván, nos reciben en su sede central de la Plaza Salamero de Zaragoza contándonos la estructura de un Colegio que abarca tres Comunidades Autónomas… «en el orden de importancia del nombre del Colegio, primero Aragón, luego Navarra y finalmente el País Vasco. Tenemos un delegado en cada uno de los siete territorios que componen la demarcación», nos empieza contando uno de los últimos socios en incorporarse a AESSIA.
«En Aragón somos alrededor de 400 ingenieros agrónomos, mientras que en Navarra, unos 300». Jiménez nos recalca lo de «Agrónomos», ya que la denominación «Agrícola» se reserva para los Ingenieros Técnicos, que solo tienen atribuciones profesionales en sus especialidades, al contrario que el Ingeniero Agrónomo que tiene todas las atribuciones. profesionales.
Esta hegemonía de aragoneses y navarros se corresponde casi con la existencia de las dos únicas Escuelas en Huesca y en Pamplona en la demarcación: la Escuela Politécnica Superior de Huesca y de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica y Biociencias de Navarra, en Pamplona. «De las dos escuelas cada año pasan a estudiar el Máster habilitante en Ingeniería Agronómica, unos 50 ingenieros», destaca Ángel Jiménez.
Una carrera con pleno empleo y mucha demanda
El auge del sector agroalimentario en Aragón, Navarra y País Vasco ha llevado al pleno empleo de los ingenieros e ingenieras agrónomas con formación de Máster. Según Ignacio Oliván, las empresas de la demarcación «tienen serias dificultades para captar profesionales».
Desde el Colegio han creado la figura del «Estudiante Registrado», por el que los estudiantes del Máster pasan a pertenecer legalmente al colegio con un estatus diferente al colegiado, pero que participa en toda la formación continuada que ofrecen.
Sin embargo, siguen siendo una cifras de nuevos ingenieros cada año bajas, «las razones están claras: una caída de las vocaciones unida a la baja remuneración en comparación con otras carreras, pese al gran esfuerzo que se necesita en una ingeniería… y si encima vas al sector agrario que trabajamos en precario con unos márgenes pequeñísimos, la remuneración se convierte en poco atractiva», nos explica Jiménez.
El Decano añade otro factor en Aragón, «si la escuela de agrónomos estuviese en Zaragoza probablemente tendríamos el doble de estudiantes que en Huesca»
¿Dónde trabaja un ingeniero agrónomo?
El campo de trabajo es una de las cualidades de la profesión: muchos trabajan en el campo de la investigación, en la enseñanza, en explotaciones agrícolas como gerentes, gestores, directores de producción, directores de calidad; en explotaciones ganaderas como responsables de todas las instalaciones, de todos los proyectos; en las industrias agroalimentarias, como las cárnicas, las de piensos, las congeladoras, las hortofrutículas, las de transformaciones lácteas, forrajes, bodegas, almazaras o regadíos. «En todas ellas trabajamos muchas veces con otros profesionales como veterinarios e ingenieros industriales con quienes mantenemos una gran coordinación.», destaca el Decano.
El auge de la industria agroalimentaria en Aragón va de la mano de los ingenieros agrónomos en muchos casos. «De hecho una de las asignaturas de la carrera es la industria agroalimentaria», explica Jiménez. Los modelos del sector porcino son buena muestra de ellos y Aragón empieza a tener un peso específico en el contexto nacional.
Un Colegio que participa en organismos influyentes
El Colegio coordina varios organismos influyentes como el Partenariado del agua del Ebro, la Alianza Agroalimentaria Aragonesa, que está compuesta a su vez por la Asociación de Industrias de Alimentación de Aragón, las Cooperativas Alimentarias de Aragón, las organizaciones profesionales agrarias o el Comité Aragonés de Agricultura Ecológica, entre otros. «Tratamos de hacer lobby para visibilizar lo que es la producción del sector agroalimentario y la valorización del trabajo en el sector», nos cuenta Ángel Jiménez.
La Seguridad Industrial, un valor de gran interés para el Colegio
Para el decano del Colegio, la seguridad industrial es fundamental. «Por los tipos de industrias que hacemos, los temas de baja tensión, el RITE, temas de incendios y sistemas de contra incendios, instalaciones frigoríficas, aparatos a presión o combustibles, necesitamos tener un contacto directo con AESSIA. Estar dentro de vosotros nos permite una relación directa con los instaladores en la Industria Agroalimentaria», destaca Ángel Jiménez, quien alaba la plataforma de tramitación de expedientes: «resulta de una gran utilidad para nuestros ingenieros», concluye Jiménez.
Para el decano del Colegio, el modelo de AESSIA debería ser extrapolable a otros organismos del Gobierno de Aragón como el INAGA. «El modelo de simplificación administrativa debería ser un patrón a seguir. De la misma manera que AESSIA tramita los expedientes de baja tensión, los Colegios Oficiales, que somos entidades de derecho público podríamos tramitar algunos expedientes para «aliviar» a la Administración», reclama Jiménez.
«Los Colegios ya somos un aval para el ciudadano y las Administraciones. Nuestros visados de construcción e instalación garantizan que el ingeniero o la ingeniera que ha hecho ese trabajo tiene una formación, tiene una condición y seguro de responsabilidad civil detrás de su acción… Deberíamos poder recuperar el visado de producción en nuestro sector», concluye Ángel Jiménez.